Camas de forja
Las camas de forja eran un mueble muy habitual en los dormitorios de nuestros abuelos. Y es que la forja se emplea desde la antigüedad para poder malear el hierro y crear diseños diversos en la decoración para el hogar.
Es cierto que en los últimos años las camas de madera y los cabeceros acolchados habían ido sustituyendo camas y cabeceros de forja. Sin embargo, a la hora de decorar un dormitorio rústico o vintage, las camas de forja son casi imprescindibles. De la misma manera, muchos fabricantes modernos sacan partido de las camas de forja para crear diseños innovadores y sorprendentes.
¿Vemos 6 ejemplos variados de camas de forja?
En la actualidad las camas de forja pueden ser de cualquier metal (aunque lo más habitual siguen siendo las camas de hierro) y exhibir cualquier diseño. Personalmente, las camas de forja que más me gustan son las clásicas, sencillas y ligeras; quedan genial en habitaciones con decoración de estilo vintage. Un ejemplo de estas camas de forja de factura tradicional es la que ves arriba, disponible en Maisons du Monde por solo 199 euros.
O las dos siguientes, de Pottery Barn y Carolina Rústica, respectivamente.
A medio camino entre el diseño clásico y moderno está el cabacero de Kenay Home.
Las camas modernas de forja suelen apostar por líneas curvas y delgadas, que juegan mucho con los espacios vacíos. Aquí debajo vemos un ejemplo disponible en Galería Arte y Forja.
Y en Portobello Street encontramos camas de forja innovadoras, con diseño figurativo (en este caso, de hojas).
¿Te gustan las camas de forja o prefieres la utilización de otros materiales?